Entrevista Relacional: Preguntas Iniciales
- supchile
- 12 jun
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En la práctica clínica, es común que nos plantemos intervenir con el entorno inmediato de nuestros consultantes, el cómo realizarlo puede ser determinante en términos de lograr objetivos terapéuticos, como también ampliar la información que tenemos respecto al motivo de consulta.
Las preguntas son una poderosa herramienta cuando, como terapeutas, no sólo nos centramos en obtener información, sino también en ampliar el campo de observación sobre la experiencia de lo que está siendo problemático, explorar el problema en un contexto determinado y comprender las dinámicas de interacción relacionadas al problema.
Von Schlippe y Schweitzer (2003) proponen una clasificación al dividir las preguntas en dos grandes categorías. Una categoría es sobre la construcción de la realidad y la segunda sobre la construcción de la posibilidad, esta división se realiza con fines explicativos, sin embargo, en la práctica de la entrevista relacionales habitual y esperable que se mezclen continuamente:

1. Preguntas sobre la construcción de la realidad
Estas preguntas están orientadas a conocer la experiencia de los consultantes respecto a estar en un proceso terapéutico, nos invitan a explorar las expectativas sobre el proceso:
¿Qué espera cada miembro de la familia?
¿Qué tendría que pasar para que noten que sus objetivos se van cumpliendo?
¿Cómo desearían sentirse frente a la situación?
Incluso ¿qué tendría que pasar para que sientan que esta sesión les fue útil?
Al preguntar sobre lo problemático es importante descomponer el problema:
¿Qué conductas constituyen el problema?
¿Ante quién se manifiesta?
¿Ante quién no?
¿Dónde, cuándo?
¿En qué se notaría si el problema se resolviera?
¿Quién fue el primero en definirlo como problema?
¿Quién lo negaría?
¿A qué se refiere exactamente cuando dice, por ejemplo, “pataleta”?
Otro eje importante a explorar juntos es el impacto del problema en el contexto:
¿Frente a quién/quienes se despliega?
¿Cómo reacciona cada miembro cuando el problema aparece?
¿Cómo han cambiado las relaciones desde que apareció el problema?
¿Qué pasaría si desapareciera?
¿Cómo se explica cada uno que el problema a veces aparezca y a veces no?
¿Qué consecuencias tienen esas explicaciones?
2. Preguntas para construir posibilidades
Al mismo tiempo que exploramos la experiencia relacional sobre el problema, rastreamos los momentos en que ocurre, la posible funcionalidad del problema y las dinámicas que favorecen y lo mantienen, es útil realizar preguntas orientadas a las soluciones posibles indagando en las excepciones cuándo no ocurre:
¿Qué cambia cuando el problema no se despliega?
¿Qué pasó/quién actuó diferente?
¿Qué habrá percibido o sentido distinto cada miembro?
Amplificar estas excepciones utilizando las preguntas relacionales, permiten al sistema construir nuevos significados respecto a lo problemático, percibir sentido de agencia, y reconocer los recursos que les permiten abordar los momentos de dificultad.
Walsh (2004) las ha denominado como “preguntas centradas en los puntos fuertes” y para ello formula algunas preguntas que el terapeuta debe hacerse al momento de intervenir:
¿Cuáles son las conexiones familiares significativas?
¿De qué modo intenta la familia amortiguar los efectos del estrés, cuando debe lidiar con una crisis?
¿Qué miembros pueden contribuir a fortalecer a la familia?
¿Qué patrones de interacción mitigan la ansiedad y el conflicto, disminuyendo la vulnerabilidad y riesgo de disfunción grave?
¿Qué recursos ocultos pueden ponerse en práctica para manejar el estrés y superar las barreras que se oponen al éxito?
¿En qué sentido puede un cambio, en el núcleo de la familia, tener un efecto positivo sobre todos los miembros?
¿Cómo hizo la familia para recomponerse luego de haber vivido situaciones traumáticas?
Reconocer los recursos familiares es una intervención terapéutica en si misma, toda organización relacional existe porque ha logrado encontrar recursos funcionales para seguir existiendo, adaptándose a diversos contextos y procesos del ciclo vital y familiar. La entrevista relacional practicada desde la curiosidad genuina y el respeto por el otro es un importante recurso terapéutico, favorece la capacidad de reflexión de las familias, el reconocimiento de la experiencia del otro, y el dominio de acción basado en los recursos existentes y potenciales.
Belinda Decker Reyes
Psicoterapeuta, Terapeuta familiar y de parejas
Psicóloga en RED APOYATE
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